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Purificación de agua por filtración. Consejos prácticos

¿Te encuentras deseando purificar el agua de la casa y no sabes por donde iniciar? Te puedo decir que existen diversos tipos de filtros caseros que puedes construir tú mismo con materiales sencillos y económicos. Desde filtros de carbón activado hasta sistemas más rudimentarios con grava y arena, hay opciones para todos los bolsillos y necesidades. A continuación, vamos a explorar algunas de las alternativas más populares.

Filtros de carbón activado para la purificación de agua

El carbón activado es uno de los materiales filtrantes más efectivos para eliminar impurezas, malos olores y sabores del agua. Puedes adquirir filtros de carbón activado prefabricados, pero también es posible crear los tuyos propios rellenando botellas de plástico con capas de carbón, grava y arena.

Funcionamiento de los filtros de carbón
El carbón activado tiene una estructura porosa que atrapa las partículas contaminantes, reteniendo además compuestos químicos indeseables. Al pasar por el filtro, el agua queda limpia y lista para beber.

Filtros de cerámica o arcilla
Otra opción muy interesante son los filtros cerámicos o de arcilla porosa. Estos recipientes de barro cocido permiten que el agua se filtre lentamente, reteniendo impurezas y microorganismos dañinos. Aunque más toscos, cumplen su cometido de manera efectiva y económica.

Filtros de tela o lana

Si buscas una solución súper barata, puedes purificar agua empleando capas de tela o lana de oveja como material filtrante. Este sistema retiene las partículas más grandes, aunque no resulta tan eficiente para eliminar contaminantes químicos o microbiológicos.

Filtros de grava y arena

Igualmente, asequibles son los filtros de grava y arena. Se trata de recipientes (incluso puedes reutilizar baldes o garrafas) que se rellenan con capas de grava gruesa, fina y arena. A medida que el agua atraviesa estos estratos, va depurándose poco a poco.

Como ves, purificar el agua en casa es posible con un poco de ingenio y aprovechando materiales que tenemos a nuestro alcance. Elige el sistema de filtración que mejor se adapte a tus necesidades y ¡disfruta de agua cristalina sin contaminar tu bolsillo ni el planeta!

Purificación de agua por filtración

Pasos para montar un sistema de filtración hogareño

¿Listo para disfrutar de agua pura y cristalina en casa sin gastarte una fortuna? Construir tu propio sistema de filtración casero es más sencillo de lo que imaginas. Solo necesitas algunos materiales básicos y seguir unos pasos muy simples. ¡Manos a la obra!

Materiales necesarios

Lo primero es conseguir los “ingredientes” para tu filtro artesanal. Dependiendo del tipo que elijas, los componentes varían, pero en general necesitarás:

  • Un recipiente de plástico rígido (garrafón, botella, cubo…)
  • Sustrato filtrante: carbón activado, grava, arena, arcilla…
  • Tela o lana (si haces un filtro de tela)
  • Cuchilla o sierra para cortar el recipiente
  • Cinta adhesiva resistente al agua

Con estos sencillos materiales podrás montar tu filtro hogareño sin complicaciones.

Instrucciones paso a paso

Una vez reunidos todos los elementos, sigue estos pasos para crear tu depuradora de agua casera:

  1. Prepara el recipiente: Recórtalo por la mitad con la cuchilla y hazle agujeros en la base con un punzón o clavo caliente. Esta será la parte inferior del filtro.
  2. Coloca las capas filtrantes: En la parte inferior pon primero una capa de grava gruesa, encima otra de grava más fina y finalmente el material filtrante principal (carbón activado, arcilla porosa, etc).
  3. Sella los bordes: Con cinta adhesiva resistente al agua, sella muy bien los bordes del recipiente superior para evitar fugas. También puedes añadir un aro de plástico con pegamento.
  4. Ensambla las dos partes: Encaja y presiona firmemente las dos mitades del recipiente. ¡Listo!
  5. Agrega el agua: Vierte poco a poco el agua que quieras filtrar por la parte superior. Espera a que se filtre hacia abajo y recoge el agua ya purificada.

Al principio puede que el agua filtrada no esté cristalina, pero tras unos ciclos más el sistema hará su trabajo correctamente. ¡Y a disfrutar de tu creación! Una forma económica y ecológica de beber agua saludable en casa.

Mantenimiento y limpieza de los filtros y lavado de cisternas y tinacos

Mantenimiento y limpieza de los filtros

Tener un sistema de filtración de agua casero es genial, pero también requiere algunos cuidados periódicos para que siga funcionando correctamente. El mantenimiento adecuado es clave para disfrutar de agua cristalina durante más tiempo.

Frecuencia de limpieza
La regularidad con la que debes limpiar o reemplazar los componentes filtrantes dependerá del uso que les des y del tipo de filtro. Como regla general:

  • Filtros de tela o lana: Lavar semanalmente con agua y jabón suave.
  • Filtros de carbón activado: Cambiar el carbón cada 2-3 meses.
  • Filtros de grava y arena: Limpiar las gravas mensualmente y sustituir la arena cada 6 meses aproximadamente.

Mantener esta rutina de mantenimiento te permitirá beber siempre agua fresca y purificada.

Procedimientos de limpieza

Los pasos precisos variarán según el sistema utilizado, pero a grandes rasgos consisten en:

  1. Desmontar el filtro con cuidado y vaciar el agua residual.
  2. Lavar o reemplazar los materiales filtrantes según su tipo (arena, carbón activado…).
  3. Limpiar a fondo el recipiente principal con un cepillo y agua con vinagre o lejía diluida.
  4. Enjuagar muy bien para eliminar restos de cal o sarro.
  5. Volver a montar el sistema con los componentes limpios o nuevos.

Siguiendo estas pautas de higiene, podrás mantener tu filtro casero en óptimas condiciones de uso.

Lavado de cisternas y tinacos

Si además de purificar el agua que bebes, quieres mantener completamente limpios tus depósitos de agua (cisternas, tinacos, aljibes…), es imprescindible lavarlos y desinfectarlos periódicamente.

Estos son algunos consejos para un lavado de cisternas y tinacos a fondo:

  • Vacía por completo el depósito y retira los residuos del fondo con un recogedor.
  • Frota bien las paredes y el suelo con un cepillo duro y agua con lejía o cloro.
  • Enjuaga varias veces con agua limpia hasta eliminar cualquier resto de olor o suciedad.
  • Deja secar al sol durante unas horas antes de volver a llenarlo.
  • Repite este proceso al menos dos veces al año.

Siguiendo estos pasos conseguirás mantener el agua almacenada en perfectas condiciones higiénicas, libre de impurezas, algas o microorganismos indeseados. ¡Salud y bienestar para toda la familia!

Purificación de agua por filtración

Ventajas de la purificación casera de agua

Más allá de obtener agua cristalina y pura para beber, implementar un sistema de filtración casero trae consigo numerosos beneficios que quizá no habías considerado. Desde ahorrar dinero hasta cuidar el medio ambiente, pasando por tener un control total sobre los componentes, ¡las ventajas son muchas!

Ahorro económico Una de las grandes virtudes de los filtros de agua hogareños es que suponen un importante ahorro respecto a las opciones comerciales. Evitarás gastos recurrentes en:

  • Garrafones o botellas de agua embotellada
  • Servicios de ósmosis inversa o purificadores de marca
  • Traslado y distribución de garrafones

Con una inversión inicial mínima en materiales, podrás purificar agua de forma gratuita durante mucho tiempo. ¡Tu bolsillo lo notará!

Beneficios para el medio ambiente

Al prescindir de envases de plástico, reduces notablemente tu huella de carbono y la cantidad de residuos que generamos. Los filtros caseros reutilizables son mucho más respetuosos con la naturaleza.

Además, al ahorrar en transporte de agua embotellada, también se evitan emisiones contaminantes. Una forma sencilla de contribuir al cuidado del planeta desde tu hogar.

Control sobre los componentes

Otra gran ventaja es que tú eliges los materiales que emplearás para filtrar el agua. Podrás decantarte por opciones 100% naturales como cerámica, grava o telas, o por filtros más depurados como el carbón activado.

Al montar tu propio sistema, conocerás todos los componentes y tendrás la certeza de que son aptos y seguros para tu salud. Nada de aditivos químicos ni sustancias dudosas.

En definitiva, la purificación casera de agua es una excelente alternativa por su bajo coste, su carácter ecológico y porque te permite controlar al máximo el proceso. ¿A qué esperas para sumarte a esta tendencia tan práctica y responsable?

Conclusión sobre la purificación de agua

Como has visto, purificar el agua en casa no tiene por qué ser una tarea compleja ni costosa. Con un poco de ingenio y algunos materiales sencillos, puedes montar tu propio sistema de filtración y disfrutar de agua cristalina y saludable. Sigue nuestros consejos y disfruta de los beneficios de contar con agua pura de forma sostenible. ¡Tu salud y tu bolsillo te lo agradecerán!

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Ernesto Mut Canul
Ernesto Mut Canul
Artículos: 24

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